Con los 65 mil millones de pesos con los que Emcali va a adelantar la sectorización hidráulica del acueducto dizque con el fin de controlar la presión del agua y reducir las pérdidas por fugas del líquido, mejor deberían construir reservorios de agua pura en la ladera occidental para reemplazar el reservorio de agua contaminada que tienen en el oriente.
Se anunció esta semana que las Empresas Municipales de Cali le apostarán a optimizar el servicio de acueducto en la ciudad controlando la presión del agua que llega a los hogares; en otras palabras es acabar con el disfrute de la ducha en el baño, es acabar con la felicidad del hogar por las mañanas, es una actitud cicatera e invasiva del derecho al disfrute del agua. La racionalización del agua se logra con acciones macro evitando la tala en el parque natural los farallones, en su parte intermedia y la zona de amortiguación.
La racionalización también se logra evitando que las aguas que descienden de la cordillera occidental se contaminen al llegar a la ciudad y conectarse con los ríos-caño que EMCALI no recupera. Con ese dinero que van a despilfarrar es mejor iniciar de una vez la construcción de un mega acueducto al pie de Pance para captar aguas del río Pance, del río Lilí y transvasar las de un río de Jamundí, para salvar a tantos caleños que diariamente se enferman por las aguas putrefactas del río cauca que les envían por bombeo, por una potabilización que no logra la pureza con el cloro y el carbono activado entre otros componentes y nos cobran caro. Mientras que se prevén graves problemas para la ciudad de Cali en los próximos 30 años, por la contaminación y degradación de los ríos que surten los acueductos de la ciudad.
A Cali le falta agua potable para hacer viable la ciudad, y le sobra agua contaminada: la que discurre por el río Cauca, y la que se afecta después de bajar de las laderas porque los ríos se vuelven caños de EMCALI, y cuando llueve, se ven destruidos los canales de escorrentía de los suelos ante la desertización, tala intensiva e invasiones imparables. Las empalizadas de ambos lados, oeste y oriente, tienen la misma causa: falta de autoridad, vigilancia y cumplimiento de las normas ambientales.
Cali hasta tanto no conforme una ciudad-región no podrá solucionar del todo sus problemas medio ambientales porque tiene ecosistemas compartidos que no cuidan y conservan en los municipios circunvecinos y porque la presión demográfica impide esa misma conservación.
Por: Alberto Ramos Garbiras. Ex procurador Ambiental del Valle.