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15 jul 2018

López Obrador, un progresista


El primero de julio ganó las elecciones en México Andrés Manuel López Obrador (AMLO), había sido derrotado dos veces, quedó atenazado entre los dos partidos mayoritarios, el Partido Revolucionario Institucional(PRI) y el Partido de Acción Nacional(PAN) y quejas de fraude electoral se presentaron, pero fue marginado del poder. La corrupción, la pobreza y el avance de las mafias prosiguió durante los últimos 12 años. Fundó un partido alternativo, Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), y se presentó con una coalición llamada “Juntos Haremos Historia” (Morena, PT y PES),  con la que podrá gobernar desde diciembre 2018. López Obrador, de origen izquierdista, ha sido calificado como populista, y más ahora con la canalización multitudinaria que hizo para formar la mayoría electoral. Podríamos analizarlo como un socialdemócrata, progresista, con rasgos populistas, pero de ninguna manera como un demagogo.

 La segunda oleada populista en América Latina (1999/ 2018), vio aparecer el neopopulismo socialista del siglo XXI, y otras formas de socialismo, surge a partir de la profunda fracturación de la Democracia por el actuar voraz del neoliberalismo privatizador de casi todos los servicios públicos que empobreció a vastos sectores sociales.

En América Latina ha operado en los últimos 17 años  que el populismo ha llegado al poder y ejercen gobiernos progresistas de atracción(Lugo en Paraguay; Lulla y Dilma en Brasil; Mel Zelaya en Honduras; Correa en Ecuador…),   pero muchos de esos dirigentes populistas no se toman el aparato del Estado para transformarlo, solo se desempeñan dentro de ese sistema administrativo, no lo adaptan a otras formas o instituciones nuevas, precisamente porque la institucionalidad oligárquica está montada desde años atrás y no las pueden desmontar al quedar entrampados en el legalismo. Reaccionan las élites desbancadas o destronadas, utilizan la justicia supérstite para enjuiciarlos, judicializan la actividad política y regresan al poder por la vía electoral. Ojalá a López Obrador, no le ocurra lo mismo porque quedaría maniatado ante las viejas instituciones, necesita promover una Constituyente.

El populismo es cíclico su aparecimiento se registra porque las mismas clases hegemónicas se debilitan y sus castas corroen el aparato del Estado perdiendo gobernabilidad y credibilidad, los partidos políticos ya no representan al pueblo, se fractura el bloque dominante en el poder, en esa clase de coyuntura, aparecen los dirigentes populistas. No aparecen porque sean espontáneos, no, son las condiciones creadas por el mal manejo de los gobiernos que han detentado y la malformación democrática. El populismo brota porque los sistemas electorales (así sean rígidos o defectuosos), permiten la competencia de partidos y movimientos políticos; cuando los partidos formalmente establecidos funcionan bien, se vive una “normalidad” democrática y electoral; cuando dejan de representar a vastos sectores, aparece una nueva voluntad general que se expresa de manera contrahegemónica, entonces la presión popular busca quien los represente, y aparecen los populismos.

Así se puede explicar el triunfo de AMLO por la pérdida total de credibilidad de la población en los dos partidos, el PRI y el PAN. El populismo moderado y encuadrado en medidas constitucionales lo podemos observar leyenda parte del listado de su programa: 1). Explorar la posibilidad de una amnistía para combatir la delincuencia. 2). Elaborar un plan conjunto (académicos, religiosos, organizaciones) para darle paz a México. 3). Invitar al Papa Francisco para lograr la paz en México. 4). Ahorro de 500 mil millones de pesos a través de recorte de sueldos, vender el avión presidencial y otras medidas de austeridad. 5). Reformar el artículo 108 de la Constitución para que el presidente en funciones pueda ser juzgado por delitos de corrupción.6). Reducirse el sueldo a menos de la mitad de lo que gana el presidente Enrique Peña Nieto.7). No utilizará los servicios del Estado Mayor Presidencial.8). Aumentar el sueldo de maestros, enfermeras, médicos, policías, soldados y marinos. 9). Cancelar la pensión a los expresidentes.11). No gastar más de lo que ingrese al erario.12). Cancelar el servicio médico privado a los altos funcionarios. 13). Revocación de mandato cada dos años. 14). Contemplar una reforma para reducir legisladores y quitar a los diputados plurinominales. 15). Sembrar en el sureste del país un millón de hectáreas de árboles frutales y maderables. 16). Creación de 400 mil empleos en ejidos. 17). Salario mínimo del doble al actual en la zona fronteriza.18). Dar subsidios para los productores del campo. 19). Fijará precios de garantía a productos del campo.20). Producir en México todo lo que consumimos. 21). Congelar el precio de la gasolina.22). Vivienda asequible y bien localizada.23).Inhibir la expansión descontrolada de las manchas urbanas y se fomentar la densificación en su interior.

Un analista político mexicano, Saúl Vásquez, expresa dentro de un artículo publicado en la página Web FONDEA que, “El populismo es una herramienta de constitución de un grupo político, más que una ideología en sí. Es usada tanto por movimientos de derecha como de izquierda. Según el mayor referente teórico del populismo, Ernesto Laclau, el populismo es “una de las formas de construcción de la propia unidad del grupo… en consecuencia ‘el pueblo’ no constituye una expresión ideológica sino una relación entre agentes sociales”[1]. Es decir, populismo es el recurso discursivo de referirse al “Pueblo”. ¿Qué es el pueblo? Lo que el político define que sea. Es por ello que para Trump o Le Pen su pueblo son los blancos originarios de Estados Unidos y Francia ante la amenaza de los migrantes, mientras que para AMLO “Pueblo” sería todo aquel que se enfrenta a la amenaza de “La Mafia en el Poder”. El uso de esta relación dicotómica de Pueblo v. Mafia es constatable en el discurso público de Andrés Manuel desde sus primeros textos”.

A AMLO no se le puede endilgar incapacidad administrativa, fue alcalde de ciudad de México (DF) y llevó a cabo ajustes económicos y política de austeridad, persiguió en serio la corrupción, saneando las finanzas. Como Presidente asegura que rebajara las altas pensiones y prebendas de los expresidentes; ya anunció que no usará el avión residencial, ni la residencia oficial y disminuirá su propio sueldo. Está claro que su mandato ara destacarse deberá diferenciarse de estos 18 años continuos respecto a las acciones del PAN y del PRI.

 Respecto a las relaciones exteriores tiene un enorme desafío vecinal como no habría ocurrido en los últimos 90 años porque México ha sufrido muchas afrentas desde que en el siglo XIX le cercenaron o robaron el territorio, pero desde que asumió Trump las afrentas han sido en seguidilla. El Sr Donald Trump, presidente de los EEUU está persiguiendo a la población mexicana, intentando construir un muro de infamia, endureció la política antiinmigración, separó de manera infame a los niños de los padres latinos, y ha elevado los aranceles. Trump es de estirpe populista de derecha, nacionalista, supremacista, xenófobo y proteccionista del mercado nacional norteamericano. Toparse con un vecino así deja entrever unas relaciones exteriores turbulentas, porque tienen una frontera caliente, el narcotráfico no fue derrotado por Felipe Calderón, antes, por el contrario, fue alborotado y los carteles aumentaron, lo mismo la penetración de las autoridades y el debilitamiento institucional. AMLO es de estirpe populista de izquierda, cree que la Democracia puede ampliarse y modernizarse con sus propuestas, pero también es nacionalista y no va a dejar irrespetar a sus connacionales. Enrique Peña Nieto, como presidente actual, no salió bien librado de esta puja internacional, y ello seguramente afectó al electorado de su partido en las recientes elecciones.

[1] Laclau, Ernesto. La Razón Populista, Fondo de Cultura Económica. Pp.97

Por: Alberto Ramos Garbiras.  Magíster en Ciencia Política Universidad Javeriana, PhD, Doctorado en Política Latinoamericana, Universidad Nacional de Madrid (UNED- España); profesor de derecho internacional en la Universidad Libre.